Rutas en España que despertarán el aventurero que llevas dentro
Desde cuevas milenarias hasta castillos abandonados en lo alto de montañas, España es un país repleto de rincones que invitan a los más intrépidos a explorar sus secretos. En este viaje, te llevamos por senderos poco transitados, donde cada paso te hará sentir como un aventurero en busca de reliquias escondidas, historias olvidadas y paisajes que parecen sacados de una leyenda. Prepara tu brújula y tu espíritu indomable: el tesoro te espera.
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La Ruta del Santo Grial
Seguro que alguna vez has visto la película “Indiana Jones y la última cruzada” en la que se busca el Santo Grial. ¿Y si te decimos que este “tesoro” está en España? La leyenda cuenta que el Santo Grial hizo un recorrido desde Jerusalén hasta acabar en la ciudad de Valencia. En concreto, la reliquia que la Iglesia reconoce como el Cáliz que estuvo en manos de Jesucristo en la última cena se conserva en la Catedral de Valencia. En la ciudad existe una ruta que te llevará por las huellas que el Santo Grial dejó allí. Pero antes de llegar a Valencia, se cuenta que el Santo Grial estuvo oculto en varios lugares de España. Entre ellos, el Monasterio de San Juan de la Peña (en Huesca, Aragón). Si te animas a visitar este monasterio enclavado en una montaña de los Pirineos aragoneses, te fascinarán sus claustros esculpidos en la roca, el halo de misterio y las vistas que se obtienen. Vas a sentirte como en una película llena de enigmas históricos.
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Una de vaqueros en el desierto de Tabernas
El desierto de Tabernas (en Almería) está considerado como la única zona desértica propiamente dicha de Europa. Además, es famoso por haber sido escenario de numerosas películas tipo western. ¿Sabías que en esa zona se ha rodado por ejemplo “El Bueno, el Feo y el Malo? Puedes apuntarte a una excursión en 4x4 en la que te mostrarán los lugares donde personajes como “El Manco”, “Indiana Jones” o “Los Dothrakis” han vivido sus historias. Si viajas con niños, otro plan que va a encantar a los pequeños aventureros es visitar el parque temático MiniHollywood Oasys. Creeréis ser personajes de una película del Oeste paseando por el poblado, viendo a las bailarinas de cancán y visitando la comisaría del sheriff.
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Viaje al centro de la Tierra
Si tú también te has metido en la piel de un científico explorador leyendo las aventuras de esta novela de Julio Verne, hay un lugar en la isla canaria de Lanzarote que va a fascinarte. Se trata de la cueva de los Verdes: una gruta que alcanza casi los ocho kilómetros y que está formada por túneles y lagunas interiores que parecen sacadas de un libro de ficción. En realidad, es parte de un tubo volcánico que se creó tras una erupción hace aproximadamente 4.000 años. Su zona submarina es conocida como el “Túnel de la Atlántida” y es uno de los túneles volcánicos más relevantes del mundo. Atrévete a explorar los recovecos de esta cueva gracias a las visitas guiadas que se organizan. Los juegos de luces que se crean te deparan maravillosas sorpresas… Hay más ejemplos de cuevas españolas que van a despertar tu espíritu explorador. Por ejemplo, la cueva del Tesoro del Rincón de la Victoria (Málaga). El nombre ya sugiere aventura. Y más, cuando sepas que es una de las tres únicas cuevas de origen marino que se conocen en el mundo. Quizá, con suerte, como los protagonistas de películas de piratas, encuentres el famoso tesoro que cuentan que permanece oculto allí.
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En busca del oro del antiguo Imperio romano
¿Sabías que la mayor mina de oro a cielo abierto del antiguo Imperio romano está en España? Se trata de Las Médulas, un increíble paraje en la zona de El Bierzo (León) declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO en la que los romanos explotaron toneladas de tierra en busca de este metal precioso. A través de una visita guiada, puedes imaginar que eres un cazatesoros y adentrarte en una de las mayores obras de ingeniería de la Antigüedad. Este paisaje de montañas rojizas esconde 400 kilómetros de canales, algunos de los cuales superan los 100 kilómetros de longitud. ¡También es posible explorar la zona en 4x4!
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Siguiendo el rastro de los templarios
Viajemos ahora varios siglos atrás, a la época en la que los caballeros de la Orden del Temple se convirtieron en una de las organizaciones más poderosas de la Edad Media y acumularon riquezas y fortificaciones. Se afirma que hacia el año 1300 la Orden del Temple llegó a contar con una red de 870 castillos en todo el occidente cristiano. En España hay diversidad de ellos en los que se dice que los templarios dejaron su huella, entre todos podrían destacarse tres. En primer lugar, el Castillo de Ponferrada (León), donde los templarios tenían como misión proteger el paso de los peregrinos que realizaban el Camino de Santiago. Por otro lado, el Castillo de Monzón (Huesca), donde se educó al futuro rey Jaime I de Aragón. Y tampoco puede faltar en esta lista el Castillo de Peñíscola (Castellón), que además de ser reconocido por su pasado templario fue el lugar de residencia del conocido como Papa Luna durante su exilio. ¿Te atreves a desentrañar los misterios que se ocultan tras los muros de estos castillos?
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La Alhambra, espionaje y secretos ocultos
Además de ser uno de los monumentos más conocidos y bellos de España, muchos de los rincones de la Alhambra están envueltos en leyendas que Washington Irving supo plasmar como nadie en sus “Cuentos de la Alhambra”. Muchas de ellas tienen un ambiente de intriga y traiciones que podría relacionarse con una película de espías. Si quieres sentirte como el protagonista de uno de estos filmes, piérdete por los pasadizos de este lugar para despertar tu imaginación. ¿Algún ejemplo de leyenda? Una de ellas cuenta que en la sala de los Abencerrajes un sultán nazarí, al sospechar de un romance de su esposa con otro hombre, invitó allí a todos los caballeros a un banquete y los mandó asesinar. Pero también la torre de Comares, el patio de los Arrayanes o la torre de la Cautiva son escenarios de las historias de Irving.
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Una de las estructuras más enigmáticas de la prehistoria
En Antequera, en pleno corazón de Andalucía, se encuentra uno de los dólmenes prehistóricos más grandes de Europa: el dolmen de Menga, una tumba megalítica de más de 5.500 años de antigüedad. Una característica que le hace muy especial es que, en lugar de estar orientado hacia el sol, como suele ser habitual, la entrada del dolmen apunta a la conocida como “peña de los Enamorados”, cuyo nombre se debe a la leyenda de una trágica historia de amor en la que una pareja se arrojó desde lo alto de la peña por no poder estar juntos. Visita este lugar para descubrir todos los mitos que le rodean.
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